174 | MISCELÁNEA | 15 de febrero de 2006

Teatro: Sanos y Salvos
Acróbatas que convierten el circo en poesía

por Nora Lía Sormani

Imagen de difusión de la obra

A trece años del estreno de su primer espectáculo como director (Emociones simples, 1993), Gerardo Hochman figura hoy entre los artistas sobresalientes de la escena argentina. Sería incorrecto sostener que hace teatro para niños; en realidad el suyo es un teatro sinfrónico, para que todos vibren: niños, jóvenes, adultos y ancianos. Los más pequeños no se quedan afuera de Sanos y Salvos, su última creación, en la Ciudad Cultural Konex, a pesar de que se trata del espectáculo más abstracto y sutil de toda su producción.

Si en Bellas Artes, En órbita y Fulanos Hochman recurrió a variaciones temáticas (la plástica, el cosmos y escenas de la vida cotidiana, respectivamente) desde las estrategias del nuevo circo, vuelve a hacerlo en Sanos y Salvos, pero esta vez apelando a una mayor abstracción formal y narrativa, en torno de los atributos del espíritu, las virtudes, la salud intelectual y emocional. La referencia del título no alude al magnífico estado físico de los artistas (verdaderos atletas y gimnastas circenses, que podrían competir con las estrellas del Cirque du Soleil), sino a la capacidad de los seres humanos de encontrar armonía, protección y equilibrio en un mundo amenazado por la trivialidad, el vacío y la insignificancia. El programa de mano incluye un texto que resulta iluminador a la hora de entender a qué "sanos y salvos" se refiere Hochman:

"Sanos locos a salvo de la locura.
Salvos solitarios sanos de soledad.
Enamorados sanos a salvo de odio.
A salvo de la idiotez terminal.
Audaces, absurdos, sanos de vergüenza y de temor.
Verdaderos, sanos de mentira.
Arriesgados sanos de desidia.
Hambrientos de suculentas raciones de emociones.
Sanos y a salvo de la bruta humanidad.
Sanos de ignorante soberbia.
Ilesos.
Frágiles.
Incrédulos.
Ateos.
Ecuménicos.
Sedientos.
Azarosos sin disimular.
Enfermos y presos de euforia y felicidad.
Sanos y salvos".

El espectáculo responde a la estructura de varieté, un collar de cuadros en los que se van desplegando diferentes destrezas circenses, puestas al servicio de una finalidad poética, no por la destreza en sí misma. En este sentido Hochman aprovecha todo cuanto ha investigado en el lenguaje del nuevo circo. Pero Sanos y Salvos es mucho más. A diferencia de Ronda o de Gala, Hochman abre su lenguaje de dirección hacia una desdelimitación de los géneros, un auténtico "teatro total" en el que la destreza circense se cruza con la danza contemporánea, la música, el drama, la palabra, el trabajo con objetos, la exhibición gimnástica, la plástica, el absurdo, el humor, el contacto directo con el público y el juego. El espectador asiste fascinado a cuadros de diversos estilos en los que Hochman-director logra mantener durante una hora y veinte la más absoluta atención.

Buena parte de la poesía surge del impacto de estos atletas-artistas cuyo cuerpos han superado la barreras de la física y la gravedad para ingresar en los territorios de la poesía. La presencia en vivo de los músicos y la excelente partitura interpretada constituyen un espectáculo en sí mismo. El diseño espacial longitudinal, que ubica a los espectadores en platea bifrontal, quiebra la estructura tradicional del picadero circense y evoca la dinámica del "parade" o desfile callejero, a la vez que favorece los cuadros con muchos acróbatas, las "caminatas" de un extremo a otro y la visión de los espectadores entre sí. El trabajo a lo ancho del corredor, gracias a la proximidad del público, le permite a Hochman en un momento hacer que sus actores vuelen sobre el público.

Belleza, perfección, sencillez y la apelación a un amplio espectro de emociones son algunos de los componentes que hacen de Sanos y Salvos un espectáculo que no puede quedar sin ser visto.

Ficha Técnica
Sanos y Salvos
Idea y Dirección General: Gerardo Hochman.
Música y Dirección Musical: Omar Giammarco.
Iluminación: Gonzalo Córdova.
Escenografía: Duilio della Pittima.
Vestuario: Laura Molina.
Coreografía: Compañía La Arena.
Producción General: Minina Fund.
Acróbatas: Carolina della Negra, Luciana Mosca, Florencia Valery, Virginia Molina, Lorena Díaz, Matías Plaul, Mariano Carneiro, Lucio Baglivo, Rodrigo Oses, Ernesto Terry.
Músicos: Pablo Bronzini, Nicolás Santamarina, Luis Rodrigo Díaz Muñiz, Delfina Zorraquin, Manuela Weler.
Funciones: jueves, viernes y sábados a las 21 horas, domingos, a las 20 horas, en Ciudad Cultural Konex (Sarmiento 3131, Buenos Aires). Más información en la página web de la obra: www.sanosysalvos.com.ar.


Nora Lía Sormani (norayjorge@fibertel.com.ar) nació en Buenos Aires en 1965. Es Licenciada en Letras, egresada de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Buenos Aires. Se especializa en estudios sobre teatro, literatura y cultura para niños y jóvenes. Recibió el Premio Pregonero de la Fundación El Libro 1994-1995 por su labor en periodismo gráfico sobre literatura infantil. Integra el Consejo de Redacción de la revista La Mancha. Papeles de Literatura Infantil y Juvenil y es co-conductora del Programa País Cultura (Radio Nacional, AM870). Actualmente realiza una investigación sobre la literatura infantil en el Río de la Plata, coordinada por la escritora Graciela Montes. Comenta libros para chicos y jóvenes en el Suplemento Cultura del diario La Nación. Es autora de la compilación ¿Sólo los chicos? Cuentos argentinos de todos los tiempos (Buenos Aires, Ediciones Desde La Gente, 2002) y de El teatro para niños. Del texto al escenario (Rosario, Homo Sapiens Ediciones, 2004).


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