70 | LECTURAS | 6 de febrero de 2002

Qué leer para entretener a niños inquietos o aburridos
(Recomendaciones de Graciela Montes)

por Pablo Mendívil

(Artículo publicado en el suplemento Radar Libros del diario Página/12, Buenos Aires, 29 de marzo de 1998. Reproducido en Imaginaria con autorización de Graciela Montes y Página/12. Agregamos las portadas de los libros recomendados y, al pie, sus datos bibliográficos.)

Enarbolando la bandera en defensa de los libros para niños, que usualmente son tomados como un género menor, Graciela Montes da cinco infalibles soluciones para terminar con el "Ma, me aburro".

Portada de la edición de Colihue de Huckleberry FinnSu primera elección es un clásico: Las aventuras de Huckleberry Finn, de Mark Twain, porque "fluye como el propio Mississippi —su escenario—, entre el humor inclaudicable, la observación vívida del mundo y a veces la melancolía. Además, contiene una de las más bellas imágenes de la literatura universal: la precaria balsa en la que un negro esclavo y un niño pobre se empecinan en alcanzar la libertad". Montes recomienda la traducción al castellano editada por Colihue, en la serie "Los libros de Boris".

Portada de "El pequeño Nicolás"El siguiente es El pequeño Nicolás, de Sempé y Goscinny: "Un libro desopilante, irónico y lleno de frescura, que al mismo tiempo presenta una saludable sátira al mundo que rodea al niño, léase la escuela, los compañeros y los padres. Encuentro algo de Nicolás en un personaje adorable como Bart Simpson". (1)

Portada de "Cuento negro para una negra noche"Montes, que en estos momentos edita, junto con otros escritores, La Mancha —una revista de debate sobre la literatura infantil— (2), continúa sin prisa, justificando concienzudamente sus elecciones. Cuento negro para una negra noche, de Clayton Bess, es "un planteo dramático, sin concesiones —y bello, además— de la situación límite en que nos coloca, a cada paso, tener que elegir entre aceptar y amar al otro, o protegerse del riesgo que supone entrar en tratos con él. No conozco otro libro que se anime a vérselas tan francamente con el conflicto sin simplificarlo en lo más mínimo."

Portada de "Cartas de un cazador"Cartas de un cazador, de Horacio Quiroga, es el cuarto que recomienda en una lista en la que el orden no determina prioridad. Allí encuentra "cartas cálidas y honestas en las que un padre les cuenta el mundo a sus hijos pequeños sin excluir de él el peligro, ni la lucha, ni la muerte. A mi modo de ver, muy superior al más famoso Cuentos de la selva." (3)

Portada de "Los imposibles"Para terminar, a Montes le encantaría dar una larga lista de títulos escritos por narradores locales y de hoy, antes que tener que decidirse por uno. Pero finalmente elige Los imposibles, de su colega Ema Wolf, porque "hay maestría en la escritura, un humor punzante en la mejor tradición de Macedonio Fernández, y un ritmo y una economía perfectos." Y no se olvida de aclarar que lo elige "en representación de toda una rica literatura infantil contemporánea argentina, en la que hay al menos diez libros imperdibles de diversos autores."


Notas de Imaginaria

(1) Hay otros títulos que forman la serie de este personaje, todos editados por Alfaguara: Los recreos del pequeño Nicolás, Las vacaciones del pequeño Nicolás, Los amiguetes del pequeño Nicolás y Joaquín tiene problemas.

(2) Desde la creación de la revista —en julio de 1996— hasta diciembre de 1998, el Consejo de Dirección de La Mancha estuvo integrado por Graciela Cabal, Laura Devetach, Ricardo Mariño, Graciela Montes, Graciela Pérez Aguilar, Gustavo Roldán, Silvia Schujer y Ema Wolf.

Portada de "Peligro en la selva"(3) Los cuentos que integran Cartas de un cazador se publicaron por primera vez en la revista infantil Billiken, en 1924. Algunos de ellos se incluyeron en el libro Peligro en la selva (Buenos Aires, Libros del Quirquincho, 1987; colección Serie Negra), editado por Graciela Montes y bellamente ilustrado por Delia Contarbio.


Los recomendados
Datos bibliográficos de las obras citadas por Graciela Montes

  • Cartas de un cazador. Horacio Quiroga. Montevideo, Arca Editorial, 1988.

  • Cuento negro para una negra noche. Clayton Bess. Ilustraciones de Manuel Ahumada. Traducción de Rafael Segovia Albán. México, Fondo de Cultura Económica, 1992. Colección A la orilla del viento, serie Para los grandes lectores.

  • El pequeño Nicolás. Textos de René Goscinny. Ilustraciones de Sempé. Traducción de Esther Benítez. Madrid, Editorial Alfaguara, 1990. Colección Infantil, serie Naranja.

  • Las aventuras de Huckleberry Finn. Mark Twain. Ilustraciones de Nona Umbert. Traducción de Graciela Montes. Buenos Aires, Ediciones Colihue, 1997. Colección Los libros de Boris.

  • Los imposibles. Ema Wolf. Ilustraciones de Jorge Sanzol. Buenos Aires, Editorial Sudamericana, 1988. Colección Pan Flauta.


Artículos relacionados: