186 | LECTURAS | 2 de agosto de 2006

Conversación abierta con Ana Padovani
Invitada especial del Foro de Imaginaria y EducaRed

Foto de Ana PadovaniEntre el 19 y el 28 de julio de 2006, Ana Padovani fue nuestra invitada especial.

El diálogo con los participantes giró alrededor del arte de la narración oral.

Aquí presentamos una parte de lo ocurrido durante esos diez días. La versión completa se encuentra en la sección correspondiente del foro, que lo invitamos a visitar. Hemos corregido errores de tipeo y aclarado algunas frases, respetando siempre el sentido de los mensajes originales.


Presentación 

Ana Padovani estudió música y se graduó en psicología. Su vocación por el arte la llevó a estudiar teatro encontrando en la narración de cuentos la manera de reunir sus intereses y búsquedas. Siendo una de las pioneras de este arte en la Argentina, viajó a Francia donde se nutrió con sus más destacados narradores.

Fue invitada por "The National Storytelling Association" de Nueva York, para participar en un intercambio entre profesionales de distintos lugares del mundo, siendo muy bien recibidos y comentados sus relatos (en castellano e inglés). 
 
Participó con sus espectáculos para niños y adultos en las ciudades de Barcelona, Zaragoza y Madrid, actuando entre otros en el teatro El Arbolé, Biblioteca Nacional de Zaragoza, Sala Cuarta Pared y Casa de América en Madrid.

Representó a la Argentina en los festivales de narración de Río de Janeiro y San Pablo (Brasil); Montevideo (Uruguay), Tenerife (Islas Canarias), Huesca, Valencia y Segovia (España) y Guayaquil (Ecuador). 

Recibió el premio ACE (Asociación Cronistas del Espectáculo) a Actuación en Unipersonal, temporada 2001-2002 por su espectáculo "La voz del terror", y fue nominada en el mismo rubro por "Querida Niní" en la temporada 2003-2004. 

Fue la primera narradora distinguida con el Premio Pregonero a Narrador otorgado por la Fundación El Libro.

Ha editado el casete “Cuentos para contar”, el CD "Cuentos de terror y de suspenso" por Ediciones Sonoras, y el libro “Contar cuentos, desde la práctica hacia la teoría” publicado por Editorial Paidós y que recibió el premio Mención de Honor al mejor libro de educación de edición 1999.

Es miembro de la Comisión organizadora de los Encuentros de Narración Oral que se desarrollan en el marco de la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires. Creó el espacio de narración para adultos en dicha Feria y continúa con su coordinación. 

Ha recorrido casi toda la República Argentina dictando talleres y realizando espectáculos que fueron presentados entre otros en los siguientes lugares: Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, y de diversas provincias, Feria Infantil y Juvenil, Teatro Municipal General San Martín, Centro Cultural Recoleta, Teatro Presidente Alvear, Teatro Nacional Cervantes, Festival de Espectáculos Infantiles de Necochea, Biblioteca Nacional, Museo Histórico Nacional, Dirección de Bibliotecas de la Ciudad de Buenos Aires, Comisión Nacional de Bibliotecas Populares, Universidad de Belgrano, Complejo Cultural “La Plaza”, Fundación Banco Patricios, La Casona del Teatro, entre otros. 

Su página web es www.anapadovani.com.ar/


Gracie 

¡Hola Ana! También sos nuestra invitada-pionera en el tema de la narración oral, que hasta ahora nunca tratamos en esta sección "Invitados especiales". Me alegra que los/as foristas puedan plantearte preguntas, dudas e inquietudes. Y aquí va la primera. ¿Cómo descubriste que la narración oral era un camino para sintetizar tus intereses y búsquedas? 


Ana Padovani 

Hola Graciela, gracias por la bienvenida. Con respecto a lo que me preguntas te diré que, como todo "descubrimiento", no fue pensado ni buscado, o sea que no fue un "invento". Después de haber transitado un largo camino (era maestra, psicóloga, profesora de música, estudiaba teatro), encontré que contando cuentos resumía todo aquello. Casi podría decirte que fue una especie de "síntesis feliz". 


Andrés 1530

Bienvenida, señora Padovani. Mi primera pregunta intenta ir también al comienzo de la historia. ¿Usted comenzó a narrar (oralmente) leyendo cuentos a sus hijos y/o sobrinos? Muchos de los foristas aquí presentes han vuelto a la literatura infantil y juvenil de esa manera.

Y una pregunta más (por ahora): Tengo entendido que con algunos de los cuentos que usted narra, hace previamente un trabajo de reescritura para que sean más narrables. ¿Esto es así?


Ana Padovani 

Como todos, también les conté cuentos a mis hijos y me alegra mucho saber que muchos hayan vuelto a la literatura a través de eso.

En cuanto a tu segunda pregunta, es un tema muy largo, pero van algunas ideas. Yo no le llamo precisamente "reescritura", aunque creo que aludimos a lo mismo. Se trata de hacer un delicado trabajo donde la voz del escritor esté presente así como la del narrador. Para lograrlo, lo fundamental es no equivocarse en la elección del cuento, o sea buscar aquel texto con el que se tiene una afinidad particular, tomar aquella voz donde uno se puede "instalar" como si fuese la propia. 


Eariel 

Hola, ¡bienvenida!  
Hace unos años tuve mala suerte: en una seguidilla de presentaciones de narradores orales que vi, y un par de veces en que en alguna presentación de libros subió al escenario un narrador oral. Me pareció que si alguien "narrara" así alguno de mis cuentos, me sentiría un poquito espantada. Sé que tuve mala suerte, porque después empecé un cursito de narración para chicos y me gustó lo que me enseñaron y lo que hicieron mis compañeros (bueno, casi todos). (Aclaro que no lo terminé porque llegó el invierno y me dio fiaca.)  
 
En los muchos congresos y encuentros de narradores orales a los que asististe, ¿te encontraste en ellos con algunos narradores con los que te parece que los autores narrados se hubieran espantado? No es necesario dar nombres, pero sí quizás describir alguna técnica o estilo que te parezca que podría tener ese efecto. 


Ana Padovani 

Por supuesto que en este mundo "hay de todo". Puedo decirte por ejemplo que una cosa que me sorprende es que, por ejemplo, en España, adonde voy con frecuencia, nunca se citan las fuentes (o sea, no dicen los nombres de los autores), y a veces hasta llego a creer que es mejor no hacerlo porque no les haría ningún mérito mencionarlos. En fin, son temas que atañen no sólo a la estética sino a la ética y en ese sentido hay tantas vicisitudes como en la vida misma. 


starosta 

Buenas noches, Ana.  
Todos queremos escribir y contar nuestras cosas. Me pregunto qué te hizo querer contar las de otros. Y digo más. Muero por saber qué pasa por tu cabeza a la hora de elegir un texto para narrar. 


Ana Padovani 

Debo confesarte que nunca sentí el deseo ni de escribir ni de contar mis propias cosas (por lo menos hasta ahora). Desde siempre he sido crédula y fantasiosa. Desde muy chica volaba con los libros, con el cine o con la radio y recuerdo que cuando contaba las historias que me conmovían a veces me quedaba como sin aliento. Tal vez por eso después me costó poco empezar a hacerlo en el escenario. Cuando cuento cuentos es la misma sensación, me meto en una historia, me la creo y por eso necesito contarlo para que los demás sientan lo mismo, es una especie de irrefrenable impulso por compartir lo que me emociona.

En cuanto a tu segunda pregunta, me resulta difícil decirlo en palabras, tal vez puedas entenderlo a partir de lo anterior: hay una emoción muy fuerte y un muy fuerte deseo de transmitirla. 


Rosa Elisa

Ana te vi por primera vez este año en el Encuentro de Buenos Aires y leí tu libro. Soy gran admiradora tuya y por eso no puedo ser objetiva. Igual, la oportunidad de comunicarme contigo me pareció maravillosa. Estoy tratando de narrar cuentos de terror porque los chicos uruguayos en edad escolar los piden constantemente. ¿Cómo puedo conseguir tu CD en Uruguay?


Ana Padovani 

Muchas gracias, Rosa, por tus palabras. Con respecto al CD, dudo de que esté en el Uruguay. Acá en Buenos Aires está en las librerías Yenny, en la Boutique del Libro, en Cúspide. Tal vez si vienes, o viene algún amigo, o si quieres, te puedes comunicar por mail conmigo y lo vemos. 


Fernando 2006

Ana, quiero felicitarla por toda su trayectoria y por la pasión por escuchar que sus narraciones despiertan en los demás.  ¡¡Usted es una genia!! Soy maestro bibliotecario y he aplicado muchas de las actividades que enumera en su libro y que dicta en sus talleres. ¡¡Gracias en nombre de los docentes argentinos!!


Ana Padovani

Muchísimas gracias. Lo acepto con orgullo y alegría porque lo siento como una recompensa por el trabajo. Mi único deseo y mi mayor alegría, si lo logro, es que otros puedan disfrutarlo como yo.


Andrés 1530

Lo que usted dice en una respuesta anterior sería como "intrainstalarse en el cuento a narrar" ponerse el cuento como un ropaje. Creo que entendí, aunque debe haber cuestiones técnicas algo arduas de explicar...


Ana Padovani

A mí no me sirve la imagen del cuento como ropaje, creo que va más adentro. En fin, lo que importa es la esencia. Las cuestiones técnicas también dan para mucho más.


Andrés 1530

Estuve en contacto hace poquito con el cuento original de Pinocho. Al leer esos diálogos, inevitablemente llevaban a "ver" una función de títeres de aquella época, son diálogos chispeantes y disparatados, muy de plaza pública; la novela de Collodi es extensa pero, ¿no se ha tentado de narrar algunos capítulos (especialmente los que No están en la película de Disney)?


Ana Padovani

Siempre es una muy buena idea que me ronda como muchas otras, ¡ojalá nos alcanzara el tiempo y la vida para todos los sueños! Muchas gracias por recordarlo


Andrés 1530

Leyendo tus respuestas veo que nombrás a la ética, algo que hacés también en tu libro (de paso lo estoy releyendo); ¿podrías darnos un ejemplo de una actitud no ética en un narrador?


Ana Padovani

Estas cuestiones son muy personales y puede haber quien entiende las cosas de otro modo. Yo puedo decirte que no me parece ético, por ejemplo, ir al espectáculo de un narrador con un grabador (sin avisárselo), para tomar aquellos cuentos que resultan probados y exitosos.  
Tampoco coincido con tomar el cuento de un autor y adjudicárselo como propio, o ni siquiera nombrarlo.


ppujalte

¡Bienvenida! La he escuchado en varias oportunidades y cada vez fue un gusto mayor. ¿Cómo realiza la selección de cuentos para narrar? Sin que nos ofrezca sus secretos, ¿cuáles son las variables que considera respecto del público oyente?


Ana Padovani

La selección se da en forma natural en la medida en que se encuentran aquellas ideas que "golpean fuerte" y se siente el impulso de compartirlas. En cuanto al público tomo en cuenta lo que me resulta más natural, la edad, el sexo, los intereses, las experiencias. Aunque muchas veces uno se lleva sorpresas y hay que resolver sobre la marcha. Por supuesto que la facilidad para eso se da, como en todo, cuando se adquiere el oficio.


Pacho

Tuvimos oportunidad de verla aquí, en Reconquista, en la piel de Niní Marshall no hace mucho tiempo. Para nuestros hijos, tener este primer acercamiento a esta mujer grandiosa y de su mano es algo por lo que le estaré siempre profundamente agradecido. Luego viajamos juntos en el mismo colectivo hacia Buenos Aires y fue un placer conversar unos minutos con usted.

En ocasiones, creemos haber elegido la mejor historia para contársela a nuestros hijos por las noches y ponemos en ello todo el esfuerzo, pero no siempre están con ánimo de escuchar historias o, con sinceridad pasmosa, nos la rechazan. Es entonces cuando dan ganas de abandonar la tarea pues uno piensa que jamás agarrarán el gustito por la lectura. ¿Qué me recomienda hacer? En casa nos gusta mucho leer y hay libros por todos los rincones, tengo miedo de que los chicos se "asusten" y terminen huyendo de los libros.


Ana Padovani

Lamento decepcionarlo, no tengo la solución. A mí me parece que en eso, como en todo lo que tiene que ver con la educación de los hijos, siempre cometeremos errores, nadie está a salvo. En todo caso le diría, aunque puede resultar de perogrullo, que no fuerce nada, porque suele ser contraproducente, y que confíe en lo que está bien sembrado, porque eso a la larga siempre fructifica.


Ángela Ruano

Bienvenida, Doña Ana. Es la primera vez que oigo su nombre, pero por lo que leo creo que es una persona especial. Me presento, soy Abuela Ángela y leo los cuentos a mis nietas y amiguitos. Mi pregunta es: ¿hay alguna manera especial de contar los cuentos para que los niños los sientan profundamente? Gracias anticipadas por su interés en leernos. Las respuestas que leo de su parte me están pareciendo magnificas.


Ana Padovani

Lamento si me reitero, pero no encuentro más fórmula que ésa: enamorarse de la historia, sentirse tocada por ella, querer que a otros les pase lo mismo. Felicitaciones por lo que hace.


Popea

Hola, Ana, hace poquito que estoy en el foro y recién hoy descubrí este sector mientras andaba a la búsqueda de una novela policial para adolescentes. Es una suerte que haya personas que, como vos, tengan esa profesión. Me gustaría conocer alguno de tus relatos.


Ana Padovani

Mis relatos se conocen "en vivo", dada la índole de mi trabajo. Si te interesa y tienes chicos, a partir del sábado estaré en la Biblioteca Café durante las vacaciones de invierno.  
En cuanto a lo registrado, hay un CD con cuentos de terror y suspenso que puedes encontrar en librerías Yenny, Cúspide, la Boutique del Libro, y también un libro que sacó Paidós "Contar cuentos, desde la práctica hacia la teoría". También tengo un casete "Cuentos para contar", pero no está distribuido. Por cualquier cosa puedes entrar a mi página: www.anapadovani.com.ar


Andrés 1530

“Contar cuentos” es de 1999 y creo que es un libro muy servicial; quiero decir que al leerlo se siente que no se guardó nada.


Ana Padovani

Efectivamente y me alegro de que así lo reciban.


Margarita Daz

Hola Ana: ¡Qué bueno una narradora de cuentos por acá! Cuando estaba en la primaria (tengo 42 ahora) participé tres o cuatro años de un club de narradores y fue una experiencia estupenda. Trabajábamos con maestras jardineras y otras maestras y después todos los domingos a la mañana narrábamos por turnos cuentos en una plaza y por cierto para el día del niño, tengo excelentes recuerdos. No sé si ese tipo de experiencias se siguen llevando adelante en las escuelas. ¿Tenés noticias al respecto? y ¿qué opinión te merece ese tipo de propuestas? ¿Te parecen válidas? ¿Cuál sería para vos la "escuela" para llamarlo de algún modo donde debiera formarse alguien interesado en la narración de cuentos?


Ana Padovani

Qué bueno que hayas podido tener esa experiencia y ese buen recuerdo. Por suerte sigue habiendo escuelas interesadas en el tema. El otro día hasta me enteré de que en una pequeña población de Salta se esté implementando que los adolescentes vayan a las casas a leer o contar cuentos. Y como ésa hay otras, tal vez menos complejas pero igualmente eficaces. Por ejemplo, los alumnos mayores que les narran a los menores.  
Con respecto a la formación del narrador es un tema bastante amplio, pero te diré que creo que la primera experiencia tal vez parte del ámbito familiar. Se sensibiliza a un niño contándole o leyéndole cuentos. Si el interés prende en él, seguramente luego querrá seguirlo desarrollando. Yo creo que hacerse narrador es algo así como descubrirse a sí mismo, es un trabajo de búsqueda interior en el que en todo caso el maestro hace una tarea de conducción para que el otro vaya encontrando su propio repertorio y sus propios recursos. En fin, una tarea ardua y a la vez delicada.


Rossana

Acabo de leer gran parte de lo aquí expuesto. Primero quiero felicitar a doña Ana Padovani. Al igual que Ángela Ruano, es la primera vez que oigo de usted.  
Creo que la clave está en lo que menciona en primera instancia.  
Usted dice: “Siempre he sido crédula y fantasiosa, cuando cuento cuentos me meto en la historia y me la creo. Tanto es así que pierdo el aliento al ir narrando, necesito que los demás sientan  y se emocionen tanto como yo lo hago”.  
Ana, esto que usted hace es un verdadero arte. Para lograr que los demás se emocionen y sientan lo que uno siente, hay no sólo que sentir amor, hay que saber entregar.  
Es el arte de amar y dar.  
En este momento, luego de haber leído lo que realiza, siento la necesidad de abrazarla y darle las gracias, por lo que hace. Ojalá muchas Ana Padovani, plagaran nuestro planeta.  
Necesitamos volver a la tradición oral. Al menos mantenía las mentes alertas y afloraba el espíritu creativo que todos poseemos.  
Hay que despertar las almas dormidas. ¡Bravo por usted! Espero sienta mí abrazo.


Ana Padovani

Muchas gracias por tan hermosas palabras. Me emocionaron casi, casi como los cuentos. Siento el abrazo y lo retribuyo de todo corazón.


Andrés 1530

¿Empezó usted narrando para niños y luego lo hizo para grandes? ¿Cómo fue esa transición? (Sé que ahora sigue narrando a niños.) ¿Tuvo idea de narrarles a grandes desde el comienzo?


Ana Padovani

Diría que todo fue como un proceso natural. Comencé narrando a niños porque fui maestra y lo fui haciendo a grandes en la medida en que fui descubriendo lo que pasaba con ellos. Lo que más me gusta es alternar los públicos.


ppujalte

Pregunto lo mismo que Andrés y agrego: ¿hay que tener además "oficio"  de actriz?


Ana Padovani

No necesariamente, a veces puede ayudar y otras no. Lo importante es tener claro que lo que se quiere es contar una historia y poner a su servicio todos los recursos que se tienen, pero que sean genuinos. No se trata de copiar, imitar o buscar por fuera de uno mismo. Yo creo que en el oficio del narrador, como en pocos, se nota "la verdad" (perdón, no se me ocurre otra palabra). La gente agradece lo que se le da desde lo más profundo, por muy pequeño que sea. También creo que a veces se confunden algunas cosas y de pronto el narrador quiere transformarse, por exigencia del mercado, en un animador, humorista o comediante. No quiero con esto decir que no hay que serlo, sino que lo importante es "ser quien se debe ser", "encontrar la propia voz".


Rossana

Querida Ana (me tomo la libertad de llamarte así, porque te siento), quiero decirte que las puertas de mi casa están abiertas. Cuando quieras venir a Chile, aquí estaré con los brazos abiertos para recibirte.

Acabo de llegar de una especie de terapia. Fue muy hermoso y me acordé de ti y de lo que decías. Es más, lo comenté en la sesión. Nos hicieron a todos (10 adultos) presentarnos como niños chicos. Fue emocionante como nos abrazábamos unos a otros. Cada día me gusta más esto de limpiar mí alma y ayudar a mí corazón en el proceso de quitar las espinas. Les narré el último de mis cuentos que se llama "La casa junto al lago". Lo hice para una amiga a la cual quiero muchísimo; al comienzo no podía leerlo de tanto que me emocionaba. Entonces te utilicé y dije "Vamos Ana Padovani, dame un poco de tu fuerza". Gracias a ti lo logré y ahora te lo agradezco.


Ana Padovani

Querida Rossana, me alegro tantísimo de saber nuevamente de ti. Me alegro también del proceso que estás haciendo y te deseo lo mejor. Si en alguna pequeña cosa he contribuido me daré por más que satisfecha y feliz. Si vienes por Buenos Aires no dejes de comunicarte conmigo. Para mí también sería un gusto enorme volver por tus tierras. Pero, por el medio que sea, no perdamos el contacto.


Adrina

Hola Ana, me alegro mucho encontrarme con vos aquí, en este sitio que, como verás, es un lugar muy agradable, cálido y afectuoso. Y en este encontrarte y leer tus respuestas, empiezo a conocerte de otra manera, y me gusta, tanto como cuando te escucho narrar.

Te cuento que soy una de las organizadoras de las Jornadas de Narración Oral que se harán en Mar del Plata, en el mes de octubre, y que te contará como invitada súper- especial. Así que, ya que estoy, comparto la noticia con los amigos foristas, y los invito. Si quieren venirse por aquí a celebrar la palabra, desde el 20 al 22 de octubre, los estaremos esperando. (Ya ampliaremos la información).

Y aprovecho también para mandarte un beso enorme y decirte que te estamos esperando con mucho entusiasmo.


Ana Padovani

Hola Adrina, por supuesto que allí estaré y con mucho gusto.


Margarita Daz

Pensaba que un poco el oficio del/de la narradora de cuentos se puede considerar heredero de los viejos trovadores, narradores de cuentos y, si vamos más lejos, a lo que los griegos llamaban un poco despectivamente "logógrafos", contadores de cuentos. Creo que hoy es mucho más complejo el ejercicio por lo menos si uno mira tu propia trayectoria evidentemente, ¿la psicología ayudó en tu trabajo?

Vi en tu página que tenés unos talleres de formación de narradores. ¿Cuáles son las recomendaciones más generales que les darías a los jóvenes que empiezan a transitar el sendero?

En cuanto a la experiencia que contás de esas escuelas donde los más grandes les cuentan historias a los más chicos, acá en Rosario hay una experiencia no de narraciones específicamente de cuentos sino un voluntariado de lectura para los mayores y un sistema de abuelos "postizos" que "adoptan a nietos" y entre esas tareas se encuentra el narrado de cuentos, dos experiencias me parece muy saludables y vinculadas a esa cosa, a ese calorcito familiar que invocás como materia prima inicial. 


Ana Padovani

La narración de cuentos es tan antigua como el hombre, yo tengo la hipótesis de que apareció junto con el fuego y la palabra. El tema es que, como propuesta escénica, es una adquisición de finales del siglo pasado, más exactamente de finales de los ‘60. En cuanto a la formación de los narradores que trabajamos en la escena, entre los que me encuentro, creo que todo cuanto se hace colabora a ampliar el espíritu y enriquecer la cultura y el alma. En ese sentido, creo que me ayuda el ser psicóloga como todo lo demás que he hecho y hago, desde música, trabajo corporal, vocal, etc., etc., etc. Siempre estoy a la búsqueda de todo lo que puede enriquecer mi trabajo. Creo que nuestro cuerpo es nuestro instrumento y hay que tenerlo siempre "bien afinado". Y esto me parece que debería ser válido para todos, también para quienes quieren iniciarse en este oficio.

Con respecto a lo que comentas de Rosario, me alegro de saberlo. Sin duda debe haber en muchos lugares ese tipo de experiencias, sencillas, potentes y a la vez desconocidas. Para eso también sirven estos foros, para darlas a conocer.


Ángela Ruano

He leído que también estuviste aquí en Madrid. La próxima vez que vengas te ofrezco mi casa y mi persona para lo que quieras y de todo corazón. Me gustaría saber más de tu obra.


Ana Padovani

Es un gusto que podamos establecer este contacto y le agradezco su generosidad. Para conocer algo más de mi trabajo puede mirar mi sitio web: www.anapadovani.com.ar. Iré a España en noviembre y, si estoy por Madrid, tal vez podamos conocernos personalmente.  


M. Eugenia

Hola Ana, me encantaría oírte alguna vez en mi país, Colombia. Te felicito por esa profesión-arte que escogiste. Es maravillosa. Considero que no es nada fácil, porque "contar bien" y hechizar al público, requiere más que una buena memoria y dicción. La expresión corporal, los cambios en el tono de voz, los gestos faciales, de las manos... todo influye para atrapar a los oyentes. Pienso que es más difícil, es sólo mi opinión, que ser actriz de teatro, porque se trata de un monólogo.

Sólo tengo una pregunta ¿Fue difícil al principio para ti, hacer que te oyeran y lograr público? ¿Cómo fue ese inicio?


Ana Padovani

También yo estaría encantada de conocer tu país. Lamentablemente este año no puede ser. Fui invitada a unos festivales que se realizan en Bucaramanga, etc., pero por cuestiones de mis compromisos acá no pudo ser. Espero que se dé en otra oportunidad.

Con respecto a los comienzos, puedo decirte que fueron muy difíciles, como todos los comienzos, pero también ahora los recuerdo con cierta añoranza. Por entonces era todo pasión, y empuje. No es que esto haya disminuido pero las exigencias son ahora de otro tipo, como sucede en todas las profesiones y con el natural curso de la vida.


Marytha

Una de las preguntas dice si para ser narrador, hay que ser actor. Yo particularmente creo que son dos cosas distintas pero quisiera saber tu opinión. Incluso en algunos espectáculos -por ejemplo encarnando a Niní- ¿lo hacés como actriz o como narradora? Con total admiración te lo pregunto porque me interesa tu recorrido teórico, claro está, lo más breve que puedas. Desde ya, gracias.


Ana Padovani

Yo también creo que son cosas distintas pero pueden ser complementarias, o a veces antagónicas. Creo que nada peor que un actor que "cuenta" su personaje en lugar de actuarlo, así como un narrador que "actúa" sus relatos sin que esto emerja de su naturaleza más verdadera.

Aunque me reitere, no me cansaré de decir que lo más importante es ser uno mismo, ser quien se tiene que ser, y muchas veces hay que buscarlo y/o descubrirlo. Yo personalmente he sido lectora y "teatrera" desde que tengo conocimiento de mí misma, y aun desde antes, por lo que me han referido. Amaba el mundo de la fantasía, y recreaba las voces y modos de caminar o moverse de quienes me llamaban la atención (los típicos inmigrantes que vivían en mi pueblo), estudié teatro pero no desarrollé el oficio de actriz sino el de narradora. Como tal, no puedo dejar de ser quien soy y espontáneamente me surgen las voces o las características de los personajes (¿y por qué habría de evitarlo? qué o quién podría prohibirlo?).

Cuando hago los personajes de Niní Marshall es respondiendo sin duda a mi veta de actriz. Pero creo que lo que engloba todo esto, más allá de las distinciones técnicas o teóricas, es que me impulsa un profundo deseo de jugar y lo encuentro tanto haciendo de Catita como cuando se me corta la respiración contando un cuento de terror.


Andrés 1530

Quisiera preguntarle si en todos estos años de narradora para niños, pudo perfilar una tendencia respecto de qué tipo de cuentos prefieren los chicos de 10-11 años (la edad de mi hijo menor).

Y también un aparte respecto del tipo de final, abierto, cerrado, muuuy cerrado (si le buscan moraleja), finales felices o finales "tristes", ¿existe en esto una preponderancia en el gusto de los chicos de esa edad?


Ana Padovani

Creo que algunas cosas generales se pueden pensar. Pero tratándose del vínculo de un padre con su hijo, hay privilegiar lo personal, para lo cual usted mejor que nadie podrá saber, intuir o buscar las respuestas que considere más adecuadas.  
Pero de todos modos vayan algunas sugerencias, hecha la salvedad.

A esa edad suelen interesarse por las fuertes emociones, creo que los cuentos de terror (más allá de la moda), así como los de suspenso y aventuras son un buen material. Pueden ser buenas desde las historias de la mitología hasta algunos cuentos de amor. En cuanto a los finales creo que los chicos de esa, como de otras edades, no esperan enseñanzas ni moralejas, quieren disfrutar del placer del cuento en sí mismo y de los mundos a los que la imaginación los puede transportar. A mí personalmente me gusta incluir algunos con finales sorpresivos, o con "efecto", porque son de mayor impacto y yo también disfruto con las sorpresas (porque aunque los haya contado cientos de veces me sigo sorprendiendo como la primera vez, y si eso no ocurriera los sacaría de mi repertorio). Espero que algo de esto le sea útil y lo felicito sinceramente si logra establecer o fortificar un buen vínculo con su hijo a través de los cuentos. Le aseguro que para él será una marca inolvidable.


Susana Sánchez

Es la primera vez que participo en un foro. La verdad que me propició tu persona y tu arte. Leí tu libro y quedé encantada. Cuántas cosas hermosas se pueden hacer con todo lo que uno mama y no lo tiene en cuenta. A través de esas páginas te metiste en mi infancia y me ayudaste a entender algunas cosas y hacerme muchas preguntas, que quizás, nunca había hecho. Ahora te pregunto a vos, el cuento "Almendrita" (creo que así se llama, o es sólo es el nombre de su principal protagonista) del que no recuerdo su autor, ¿a qué colección o editorial pertenece? Desearía conseguirlo, vos trajiste a mi memoria su nombre, aunque no pude recordar su contenido. Si recordé que me habían regalado una muñeca ("maniquí") a la que llamé así por el cuento que me leían (tenía en ese entonces cuatro años) 


Ana Padovani

Muchas gracias por tus palabras. Con respecto al cuento a que haces referencia te pediría alguna precisión mayor porque tal vez no estamos hablando del mismo.  
Podemos seguir en contacto por este medio o si quieres por mi mail: info@anapadovani.com.ar


Eariel

¿Hay algún autor o historia en especial que te encante como lectora pero al que no le puedas "encontrar la vuelta" como narradora?


Ana Padovani

Nunca he sentido el deseo de "encontrar la vuelta" para un cuento que me ha gustado como lectora. Si me gusta para narrarlo es porque inmediatamente sentí el impulso de hacerlo, no tengo que tocarlo, ni darlo vuelta. El enamoramiento es inmediato. Hay grandes autores, como por ejemplo Borges, con cuya lectura me deleito, pero jamás se me ocurrió contarlo.


Rossana

Como ya queda poco, quiero aprovecharme de este espacio y preguntarte lo siguiente: ¿Existirá acaso un bumerang que no regresó a tus manos?

Acá te esperaré con los brazos abiertos, cuando decidas venir a Chile, tal vez me ayudes a encontrar uno que perdí por el camino. No logré ver aquellos que actúan con doble personalidad o incluso personalidad múltiple, dejé incluso de verme a mí misma. Es curioso, pero en ese sentirme atraída y rechazada a la vez, logré encontrar la vuelta hacia el camino que me llevaría a alcanzar una mayor espiritualidad. Sé que entenderás lo que quiero decir. Y si no es así,  sólo piensa que una vez en un foro conociste a una Rossana que sintió y se emocionó con tus palabras. Hasta siempre, querida Ana Padovani


Ana Padovani

Querida Rossana: sospecho que estás haciendo un camino de profunda transformación interna. Ojalá haya podido o pueda darte algo, ante todo mi cariño y mi recuerdo. Te deseo lo mejor.


Marytha

Reconozco que ante la pregunta que te hicieron sobre algún autor que te guste como lectora, suponía que no te pasaba tener que "encontrar la vuelta" porque lo que narrás es lo que sentís el impulso de contar. Sin embargo a mí me ha pasado pensar que algunos autores son para leer, no para narrar... y sin embargo escucharte y que me encante. Por ejemplo nunca olvidaré tu trabajo sobre Cortázar, que no he escuchado a ninguna narradora lograr.  
Como queda poco tiempo de foro, aprovecho el momento para saludarte a vos, Ana y también a los que han participado.


Ana Padovani

Has entendido bien, de eso se trata. Cuando leo a Cortázar pienso que escribió para mí, inmediatamente me instalo del otro lado del libro, coincido con su narrador, siento sus palabras como mías. No es que me pasa con todos sus textos, por supuesto, sino con aquellos que elijo.  
También yo aprovecho para saludarte, así como para agradecer al foro y a todos los que han escrito.  


Andrés 1530

¿Vivió el hecho de "engancharse con un relato" de manera casi obsesiva y llegar a soñarlo luego? ¿O de que un relato que la entusiasmara muchísimo no tuvo mucho eco en la audiencia?


Ana Padovani

En realidad, ninguna de las dos cosas me ha ocurrido, por lo menos hasta ahora. Cuando encuentro un relato que me gusta para contar siento una enorme alegría y muchas ganas de contarlo. Empiezo a prepararlo y más tarde o más temprano, siempre surge la ocasión de poder hacerlo. Tampoco recuerdo haberme desilusionado muchísimo con algún cuento en el que cifré esperanzas vanas (espero que no me ocurra, pues debe ser feo, ¿no?).


Rosa Elisa

Ana, parece que tenemos que despedirnos. Bueno, yo te cuento que una amiga muy querida me prestó un casete tuyo y lo he disfrutado montones, incluso mis hijos se quedaron enamorados de tu voz y tus historias. Admiro la ductilidad de tu voz. Tenés una magia especial que es esencial para este oficio. Espero que muy pronto se te dé por cruzar el charco y así te disfrutamos en vivo y en directo. Yo seguiré viendo si consigo el CD y prestando tu libro a todos mis queridos amigos.

Un abrazo fraterno desde la otra orilla del Plata y te esperamos con unos mates. Desde aquí, una uruguaya con apellido italiano, como tantos.


Ana Padovani

Hola Rosa, gracias por tus palabras. Y ¿sabes? parece que dentro de poco iré al Uruguay, aún no es seguro, pero te dejo mi mail así me mandas el tuyo y te aviso. Es: info@anapadovani.com.ar


Carlos M

Me alegra saber que existe alguien que me puede contestar algunos interrogantes que me están dando vueltas desde hace mucho. No sabés la alegría que me produce ver a mis alumnos cuando les leo algunos cuentos en mis clases. Me emociona ver sus rostros cada vez que levanto la vista y por esto me entran ganas de formarme para poder invitarlos cada vez más a leer conmigo. Soy de Jujuy y por estos lados no existe una institución que me forme como narrador. ¿Existe algún lugar, lo más cercano posible a mi Jujuy, donde pueda estudiar? Por lo pronto, luego de enviar este mensaje voy a entrar a enny y pedir tu libro y tu compacto. Besos y abrazos desde Palpalá-Jujuy


Ana Padovani

¡Qué bueno saber que haya tantas inquietudes en lugares tan diversos, ojalá se pudiese responder a todos!  
En principio, te diré que sé de gente que forma en Tucumán, y puedo averiguarte en Salta. Escríbeme a mi mail y veré qué puedo hacer. Te deseo lo mejor.


ppujalte

Ana, la veré y escucharé con muchísimo placer en unos días. Les cuento a los/as foristas que Ana Padovani nos visitará en el Foro por el Fomento del Libro y la Lectura que se hace desde el 16 al 19 de agosto en Resistencia. Ya estuvo en otras ocasiones y disfrutamos todos de su versión de la "Inmiscusión terrrupta" entre otras narraciones. La esperamos con ansia...


Ana Padovani

Para mí será un gusto estar nuevamente por allá. Es un verdadero privilegio contar con un Foro de esas características y agradezco ser invitada. Nos veremos.

Bueno, ahora sí, como a Cenicienta, se terminó mi tiempo.  
Agradezco a la gente de Imaginaria la posibilidad que me dieron de participar en este foro y a todos cuantos lo hicieron por el interés que demostraron y por las ricas e interesantes actividades que se nota están desarrollando, para las que les deseo lo mejor.  
A todos les dejo el más cálido abrazo y cuando lo necesiten, no duden en comunicarse nuevamente conmigo.


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